lunes, 6 de julio de 2020

En cada momento

Los días que pasé contigo fueron los más felices de mi vida. No quiero verte. Estar contigo de nuevo era mi más sincera ilusión, pero no me arrepiento de dejarte ir. Porque yo tampoco puedo volver a confiar en ti , tú querías seguir adelante y yo quería empezar de cero. Yo había olvidado lo que era el amor y verte solo me hacía recordar, recordar que lo había olvidado. Dejé de ser el indicado cuando te empecé a hacer daño, tú no merecías lo que pasó y yo tampoco. Te transformé en mi mente, te vi con ojos que eran ciegos a lo que me hacía daño. No necesito que nadie me crea, ni siquiera tú, en especial tú. Lo aguanté por ti, es difícil creer en la palabra de un egoísta, pero no era yo en ese momento quien tomo esa decisión, era la parte de mi que te quedaste, la que te di y pensaba que podría vivir con todo el dolor, pero el dolor te cambia y te hace decir cosas que tienen consecuencias inesperadas. Te vi alejarte y pensé que era lo que me merecía, lo que necesitaba para recibir perdón sin pedirlo. Ahora te culpo, porque te dije que podías y aún así lo ocultaste. Ese día me dijiste que tal vez no sería lo mejor vivir juntos y yo ya sabía que todo estaba mal. Esa noche nos acostamos pero ambos estábamos pensando en otra cosa, en la misma cosa. Dejé de sentir para escapar del dolor y solo conseguí hacerte daño sin darme cuenta. Quise creer que te estaba dando libertad, pero solo te estaba apartando de mi, porque verte me dolía, porque saber que estabas con otro no me quitó la culpa. No te puedo perdonar que te enamoraras, aun siendo lo más lógico, lo correcto y lo que debías hacer, no te lo puedo perdonar, porque si lo hiciera estaría mintiendo. Me gustaría estar contigo en cada momento y no quiero volver a verte.